Los textiles importados deberán pagar un nuevo arancel de 15 por ciento y las mercancías confeccionadas de hasta 35 por ciento, anunció este jueves 19 de diciembre el secretario de Economía, Marcelo Ebrard. Este incremento estará vigente hasta el 22 de abril de 2026.

De acuerdo con el secretario, la decisión exime a todos los países con los que México sostiene tratados de libre comercio, como Estados Unidos y Canadá, y explicó que la medida busca evitar la pérdida de empleos en la industria textil y prevenir la competencia desleal dentro del sector.


“Con esto vamos a incentivar el desarrollo de nuestra industria nacional porque un objetivo estratégico de prosperidad compartida es aumentar el contenido nacional de todo lo que consumimos(…)Entre más contenido mexicano haya, más empleos habrá en México”, dijo Ebrard

En este contexto, Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base, advirtió que los costos de la ropa experimentarán incrementos, particularmente la que se importa desde China, al mismo tiempo que se podría generar un efecto dominó en el mercado.

“México no tiene un tratado comercial con ese país, y de allá proviene el 35 por ciento de los textiles importados (…) Si suben los precios de la ropa importada, habrá una mayor demanda de ropa nacional, lo que también incrementará sus precios”, detalló.

En la misma línea, Logística de México, firma especializada en cadenas de suministro, dijo en un comunicado que este incremento arancelario elevará los costos de importación hasta en mil 500 millones de dólares (mdd) anuales, y afectará más de 10 mil mdd provenientes del comercio anual de textiles que arriban a México.

Finalmente, comentó que anticipa un incremento en las tarifas de transporte, en gran medida por nuevos trámites en aduanas y demoras en los tiempos de entrega. Esto podría generar un sobrecosto de 500 mdd anuales.