Migrantes en México viven con creciente ansiedad debido a la amenaza del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, de implementar políticas de deportación masiva tras asumir el cargo el 20 de enero, aseguró la directora de Cafemin e integrante de la Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes (Redodem), María Magdalena Silva Rentería.

Señaló que durante los próximos meses se ve terrible el panorama para los migrantes y los albergues que los acogen, ya que el equipo de Trump desarrolla una estrategia agresiva para frenar la migración desde Latinoamérica, que incluye la deportación de miles de indocumentados y la reactivación de medidas como los Acuerdos de Cooperación en Materia de Asilo, que permitirían a este sector de la población solicitar asilo en otros países de la región.

Asimismo, Trump también busca estrechar la cooperación con países como México, Guatemala y El Salvador para frenar el flujo migratorio y devolver a los migrantes a sus países de origen, lo cual ejerce presión sobre los gobiernos de la región, que temen las consecuencias económicas de una deportación masiva, ya que muchos dependen de las remesas enviadas por los migrantes.

Al mismo tiempo, albergues en México enfrentan una creciente demanda de espacios debido al aumento de migrantes que huyen de situaciones extremas en países como Venezuela. Según la Redodem, el 2023 registró un aumento del 55 por ciento en la llegada de migrantes, especialmente niños y niñas, quienes enfrentan condiciones de violencia, extorsión y riesgo de muerte en las rutas migratorias.

Finalmente, Silva Rentería destacó que la incertidumbre sobre las políticas de Trump ha intensificado la ansiedad de los migrantes, quienes buscan cruzar la frontera antes de que el nuevo gobierno implemente cambios en las leyes migratorias.