Mientras las plataformas digitales ganan terreno en México, la lectura enfrenta un retroceso. De acuerdo con el Módulo sobre Lectura (MOLEC) 2024 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 69.6 por ciento de la población mexicana lee; pero, esta cifra ha caído un 14.6 por ciento desde 2015, cuando representaba el 84.2 por ciento.

Por el contrario, servicios de streaming como Netflix, Amazon Prime y Disney+ han alcanzado cifras mucho más altas que las de los lectores. De acuerdo con la Unidad de Inteligencia Competitiva (CIU, por sus siglas en inglés), el 83 por ciento de los hogares mexicanos están suscritos a alguna de estas plataformas digitales.

En el marco del Día Nacional del Libro, que se celebra el 12 de noviembre, vale la pena recordar que, según el MOLEC, el entretenimiento es la principal motivación para leer, con un 41.4% de los lectores optando por los libros por diversión. Sin embargo, solo el 18% de los mexicanos lee más de cinco libros al año, y un 37% no lee ninguno en los últimos 12 meses.

Asimismo, el MOLEC reportó que la lectura asociada al trabajo o estudio representa un 23.4 por ciento y aquella que está orientada a la cultura general con un 23.2 por ciento, de esta manera, los lectores se acercan a los libros por razones académicas o para ampliar su conocimiento.

Con respecto a los hábitos de lectura, más de la mitad de los lectores considera que su velocidad de lectura es regular, mientras que un 28.6 por ciento la percibe como medianamente rápida. Además, se observa que los jóvenes de 18 a 24 años y de 25 a 34 años son los grupos de edad con mayor índice de lectura, alcanzando un 80 por ciento en cada uno. En términos de género, el 71.7 por ciento de los hombres alfabetizados lee, frente al 65.7 por ciento de las mujeres.

Ante este panorama, las plataformas de streaming han modificado los hábitos de consumo al ofertar un mundo más visual y accesible, donde las adaptaciones cinematográficas de libros como las de Pedro Páramo, del autor Juan Rulfo; Arráncame la vida y Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, por mencionar algunos, ofrecen una alternativa para aquellos que prefieren la inmediatez de lo audiovisual sobre la lectura tradicional.

Por otro lado, aunque el 44 por ciento de la población mexicana prefiere los libros impresos, según una encuesta de Statista Consumer Insights, el formato digital sigue ganando adeptos al alcanzar una cifra de 40 por ciento.