El Congreso capitalino aprobó el dictamen de reformas al Código Fiscal local. El Gobierno de la Ciudad de México podrá emitir, entre noviembre de 2024 y diciembre de 2025, la licencia de conducir permanente, la cual dejó de expedirse hace 16 años.
En sesión ordinaria, los diputados locales estimaron que, en el primer año, este trámite permitirá una recaudación de entre mil 200 y mil 500 millones de pesos para el gobierno capitalino. Además, se espera emitir entre 800 mil y un millón de licencias permanentes, prácticamente el doble de la cantidad de licencias que se expiden actualmente cada año.
La reforma incorpora disposiciones al Código Fiscal de la Ciudad de México y obtuvo 41 votos a favor. El diputado Pablo Trejo Pérez indicó que la modificación busca simplificar los procesos administrativos para los conductores, mejorar la gestión de las licencias y facilitar el acceso a derechos fundamentales relacionados con la movilidad.
Trejo Pérez comentó que el objetivo consiste en reformar el inciso b) del artículo 229 del Código Fiscal local, introduciendo una licencia de conducir tipo “A” para vehículos particulares, con vigencia permanente y un costo de 1,500 pesos. También se ajustaron los incisos subsecuentes, de modo que las licencias de tipo ‘A1’ y ‘A2’ se clasificarán como incisos c) y d), respectivamente, junto con sus costos.
El diputado informó que la Presidencia de la Comisión de Hacienda solicitó opiniones de las secretarías de Administración y Finanzas, y de Movilidad. Estas secretarías emitieron consideraciones técnicas y jurídicas sobre los artículos transitorios de la iniciativa.
La discusión del dictamen en el pleno provocó un intenso debate entre Morena y la oposición. Mientras algunos abogaron por este método como una forma eficaz de recaudación, otros señalaron la falta de regulación de la seguridad vial. El dictamen reforma el Código Fiscal, pero no la Ley de Movilidad, y no incluye medidas de seguridad vial.
"Los accidentes son casos fortuitos que no necesariamente se mitigan con la aprobación de exámenes teóricos o prácticos, pues en los siniestros de tránsito convergen factores externos y los conductores experimentados también enfrentan riesgos", afirmó el diputado Miguel Macedo, presidente de la Comisión de Movilidad.
Por su parte, los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento Ciudadano (MC) criticaron la falta de exámenes para los conductores, lo que podría incrementar la inseguridad en las vías públicas. Sin embargo, los argumentos de la oposición no fueron escuchados y todas las reservas fueron desechadas.
El Congreso capitalino aprobó la medida y facultó a la Secretaría de Movilidad (Semovi) para realizar las adecuaciones legales necesarias, asegurando que ningún instrumento se oponga a la licencia.
Asimismo, los legisladores de la bancada de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) enfatizaron que la licencia no se otorgará a ciudadanos con infracciones graves o sancionados por conducir bajo los efectos de sustancias psicoactivas.