El partido Movimiento Ciudadano en el Congreso de la Ciudad de México y la asociación civil LGBT Rights México presentaron una iniciativa que busca prohibir prácticas que atenten contra la salud e integridad física de los animales. Las medidas impiden que se mantenga a los animales de compañía en espacios reducidos para controlar su tamaño, el uso de sujetadores en las orejas con fines estéticos y tratamientos que causen daños renales y cardíacos.
En conferencia de prensa, la diputada local Patricia Urriza Arellano y el activista Enrique Vives, quien acompaña el proyecto, denunciaron la explotación de los animales. “No se puede exigir que mantengan un tamaño específico durante sus etapas formativas, donde se desarrolla el esqueleto. Los mantienen en cajas, encerrados, para evitar que crezcan más; por ejemplo, en la raza de perros Chihuahua, la variación conocida como cabeza de manzana presenta deformaciones heredadas a lo largo de generaciones”, afirmaron.
Estas prácticas también afectan a los animales de uso agropecuario, limitando su crecimiento y reduciendo su existencia a fines reproductivos, lo que causa problemas renales en cerdos y aves.
Aunque ya existe un marco legal que reconoce a diversas especies de animales como seres sintientes, los legisladores sostuvieron que las adiciones buscan mejorar la ley y brindar más certeza sobre acciones que no se contemplan en la norma.