Inundaciones y deslaves que han arrasado con comunidades enteras, causando daños en infraestructura y en la vida cotidiana de miles de habitantes; las muertes ascienden a 29, luego de que las autoridades confirmaran cuatro nuevos decesos este lunes, 23 de ellas se registraron en Guerrero; cinco en Oaxaca, y uno en Michoacán.
La falta de agua y energía agrava aún más la crisis. En muchas localidades, los servicios básicos se han visto interrumpidos. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) reportó que más de 260 mil usuarios se quedaron sin energía tras la tormenta.
Aunque se han realizado trabajos para restablecer el suministro, la situación continúa. Además, el suministro de agua potable enfrenta serias dificultades debido a los daños en los sistemas de bombeo y la turbiedad de los ríos.
En Guerrero, el impacto John el mayor grade de afectación se registró en Acapulco y la Costa Chica, sin embargo, las autoridades aseguran que al menos otros 40 municipios resultaron golpeados en diferentes niveles.
En la sierra y en La Montaña, hay muchos pueblos incomunicados por la destrucción de caminos, la falta de señal telefónica y de eléctrica. En región de La Montaña, por ejemplo, los comisariados reportaron la destrucción de cosechas y temen por la escasez de alimentos.
Por otro lado, 21 municipios en Michoacán suspendieron clases, incluyendo Morelia y Apatzingán. Las escuelas han sido habilitadas como albergues temporales.
Ante este panorama, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha establecido un centro en el Estadio Olímpico Universitario, donde la comunidad puede donar productos esenciales.
En Guerrero, Movimiento Ciudadano y el Movimiento Antorchista ha abierto puntos de recolección de víveres en Acapulco y Chilpancingo, destinados a recibir alimentos no perecederos, productos de higiene personal y ropa en buen estado.
La tienda departamental Walmart ha activado centros de acopio en varias sucursales del país, invitando a la población a colaborar con donaciones de alimentos y productos de higiene. En otros estados como Nuevo León y Oaxaca, también se han establecido puntos de recolección para canalizar ayuda hacia las zonas afectadas.
También han solicitado medicamentos básicos y artículos de curación para atender heridas menores; así como productos para mascotas, como alimentos secos o enlatados.