Luego de la explosión de buscapersonas o “beepers” este martes en Líbano, 11 personas murieron, entre ellos una niña de ocho años, y 4 mil resultaron heridas según lo informó el ministro de Salud del Líbano, Firas Abiad. 

Los explosivos causaron daños materiales y humanos en diferentes puntos del país, entre ellos los suburbios del sur de Beirut, el valle de Bekaa y el sur del Líbano. Los principales afectados fueron miembros del movimiento chiita Hezbolá. 

Entre los heridos, se reporta al embajador iraní en el Líbano, Mojtabá Amaní, aunque su condición se reporta estable y fuera de peligro.

Hezbolá señaló a Israel como el "plenamente responsable" de la detonación y prometió tomar represalias. Por su parte, el ministro de Información del Líbano, Ziad Makary, condenó la "agresión israelí" a nombre de todo el país.

En este contexto, el Ministerio de Salud libanés pidió a todos los ciudadanos que tengan buscapersonas que los desechen inmediatamente

A pesar de dichos pronunciamientos, Israel no se ha pronunciado sobre el incidente.