El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) declaró inválidas las reformas a los estatutos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que permitieron la reelección de Alejandro "Alito" Moreno al frente de la dirigencia nacional.

A pesar de la decisión del INE, Moreno Cárdenas seguirá como líder del PRI hasta que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determine su situación; ante este hecho, el dirigente anunció su intención de impugnar el fallo.

El INE argumentó que no podía pronunciarse sobre el fondo de las reformas, pero señaló que el PRI no cumplió con lo estipulado en el artículo 34 de la Ley General de Partidos Políticos. Las modificaciones a los estatutos se realizaron el 7 de julio, antes de la conclusión del proceso electoral.

En el acuerdo, se declaró la imposibilidad de verificar el cumplimiento del procedimiento estatutario y la procedencia constitucional y legal de las modificaciones presentadas; sin embargo, el documento no especifica el efecto inmediato ni ordena al partido rehacer el procedimiento tras la finalización del proceso electoral. Esta tarea quedará en manos de la Sala Superior.

Alejandro Moreno, presidente nacional del PRI, expresó su conocimiento sobre la resolución del INE y su desacuerdo con la misma. En un comunicado en redes sociales, afirmó: "respetamos la decisión, pero no la compartimos. Existen criterios aprobados por la Sala Superior que legitiman nuestras decisiones internas. Conforme a derecho, acudiremos ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF)".

Representantes del PRI consideraron la medida como exagerada y acusaron a los consejeros de intromisión en la vida interna del partido. Criticaron que, en tiempos difíciles para el país y ante la influencia de Morena, lo más conveniente hubiera sido mantener las decisiones avaladas por el PRI.