El próximo domingo 8 de septiembre, a las 13:00 horas, las comisiones de Estudios Legislativos y Puntos Constitucionales del Senado de la República iniciarán la discusión del dictamen de la Reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF). Si se aprueba, la propuesta podría ser presentada al pleno del Senado el martes siguiente para su debate y, en su caso, aprobación.

Ante este panorama, la Secretaría de Seguridad Pública reforzó la vigilancia en las inmediaciones del Senado para evitar que los manifestantes tomen la Cámara alta en las próximas horas. La seguridad en la zona se ha intensificado para manejar las posibles tensiones y garantizar que la discusión del dictamen se lleve a cabo sin incidentes mayores.

El dictamen fue aprobado en la Cámara de Diputados, tanto en lo general como en lo particular, en la madrugada del miércoles 4 de septiembre. Ahora, en el Senado se anticipa una discusión y posible aprobación la próxima semana, donde se espera que Morena y sus aliados vuelvan a utilizar su mayoría para impulsar la reforma.

La reforma judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene como objetivo generar una justicia más ágil y eficiente. Entre los cambios destacados se encuentra la elección por voto popular de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). El partido del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados justifican la reforma asegurando que uno de los principales objetivos es hacer la justicia más accesible y cercana a la ciudadanía, así como incorporar jueces más sensibles a las problemáticas sociales.

En respuesta a la reforma, trabajadores del Poder Judicial de la Federación, estudiantes de Derecho de la UNAM y de otras instituciones educativas, tanto públicas como privadas, han organizado protestas. Desde la mañana, bloquearon la autopista México-Querétaro y el Periférico Norte, en dirección a la Ciudad de México, provocando caos vial.