Este miércoles, 4 de septiembre, los trabajadores y el Colegio de Secretarias y Secretarios de Estudio y Cuenta cerraron la sede de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). La decisión se tomó horas después de que ocho magistrados y magistradas del máximo tribunal del país se unieran al paro de los trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) en protesta contra la aprobación de la propuesta enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y aprobada en la madrugada del mismo día.

Rosalba Rodríguez Mireles, secretaria de Estudio y Cuenta de la Corte, aclaró que el cierre no significa la clausura de la justicia. Explicó que, aunque se cierre la SCJN, “no estamos clausurando la justicia constitucional. La Suprema Corte continuará tramitando cualquier asunto considerado urgente. No estamos en huelga, tampoco estamos de brazos cruzados. Nosotros destinamos nuestro tiempo, conocimiento y voluntad a acompañar las manifestaciones a nivel nacional contra esta reforma, así como a informar sobre los riesgos que representa para la sociedad mexicana.”

Rodríguez Mireles subrayó que el cierre de las instalaciones de la Corte es un acto de apoyo al paro de actividades en el poder judicial. Añadió que la suspensión no es ilegal, a pesar de las afirmaciones de las ministras Lenia Batres Guadarrama, Yasmín Esquivel Mossa y Loretta Ortiz.

Por otro lado, estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) presentarán su postura respecto a la aprobación de la Reforma Judicial. A pesar de la situación, las actividades en la Facultad de Derecho de Acatlán, parte de la máxima casa de estudios, se desarrollaron con normalidad durante el día.