Los integrantes del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) emitieron una advertencia sobre los riesgos que podría enfrentar la medición de la pobreza y la evaluación de programas sociales en México, debido al anuncio de la posible desaparición de dicho organismo, recurso promovido por el Gobierno Federal y que avanza en la Cámara de Diputados.

Durante la presentación del Informe sobre Evaluación de Programas de Desarrollo Social en el país para 2024, los miembros del Coneval subrayaron la importancia de mantener un monitoreo y evaluación continuos de los programas sociales, destacando estos procesos como esenciales para garantizar la transparencia y eficacia en el ejercicio del presupuesto público.

José Cruz Marcelo, secretario ejecutivo del Coneval, señaló que el organismo ha servido en los últimos años como un puente de comunicación entre los gobiernos estatales, municipales y locales con la Federación. "Si este país no reorienta sus esfuerzos a través de una estrategia interinstitucional y de complementariedad de política social, cualquier medida de política de bienestar o desarrollo social será ineficaz a mediano y largo plazo", advirtió.

Seguridad Social y Salud: Carencias de Mayor Incidencia

El Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2024 (IEPDS) del Coneval destacó que las carencias en acceso a la seguridad social y a la salud son las de mayor incidencia a nivel nacional, especialmente entre los grupos históricamente discriminados.

El reporte reveló que 46.8 millones de personas en México viven en situación de pobreza, mientras que nueve millones se encuentran en pobreza extrema. La población más vulnerable, definida como grupos históricamente discriminados, enfrenta mayores carencias en seguridad social y salud.

Particularmente preocupante es la situación de niños, niñas y adolescentes, donde 6 de cada 10 carecen de acceso a la seguridad social, dependiendo de la relación laboral de sus padres, madres o tutores. El Coneval también identificó brechas significativas en el ejercicio de derechos entre diferentes grupos de edad, con disparidades notables en la población indígena, personas con discapacidad y mujeres.

El organismo reconoció los esfuerzos del gobierno para aumentar la cobertura y alcance de los programas sociales, pero subrayó que el sostenimiento financiero a mediano y largo plazo requiere un fortalecimiento del sistema tributario mediante medidas progresivas y la diversificación de fuentes de ingresos.

El informe enfatizó que los programas sociales deben ser vistos como mecanismos que facilitan el ejercicio de los derechos sociales y como inversiones que mejoran la educación, salud, condiciones de vida, innovación y participación laboral, contribuyendo así a la fuerza productiva y económica del país.

Finalmente, el Coneval destacó la necesidad de adoptar una estructura de impuestos progresivos que incremente la carga tributaria sobre los sectores más acaudalados, definir nuevas vías de financiamiento para el sistema de pensiones y fortalecer el Sistema de Ahorro para el Retiro, para asegurar que los ingresos de los adultos mayores superen el mínimo necesario para una vida digna.