La saxofonista María Elena Ríos Ortiz, víctima de una agresión con ácido, expresó su indignación en redes sociales por la absolución y liberación de su presunto agresor intelectual, Juan Antonio Vera Carrizal, tras el fallo resolutivo del juez José Gabriel Ramírez Montaño.

"Ganó la corrupción. Juan Antonio Vera Carrizal ha quedado en libertad. 20 minutos le tomó a este juez corrupto, José Gabriel Ramírez Montaño, la resolución", escribió la saxofonista, quien acompañó su mensaje con un video en el que se escucha al juez detallando la resolución.

En su fallo, el juez Ramírez Montaño declaró: "este tribunal considera que la representación social con las pruebas aportadas no logró destruir la presunción de inocencia que tienen los acusados. En consecuencia, he resuelto absolver a Rubicel Hernández Ríos, Juan Antonio Vera Carrizal y Rubén Loaiza Chávez de la acusación de feminicidio en grado de tentativa".

Además de que los implicados quedaran en libertad de manera inmediata, también el juez ordenó el levantamiento de las medidas cautelares, incluida la prisión preventiva.

El día del ataque

Era 9 de septiembre de 2019, cuando en Huajuapan de León, Oaxaca, María Elena Ríos, entonces de 26 años, fue víctima de un ataque con ácido sulfúrico que le fue rociado en el rostro y cuerpo, causándole lesiones permanentes. Este acto de violencia fue calificado como intento de feminicidio y se le atribuyó a Vera Carrizal, un exdiputado y empresario local, quien presuntamente pagó a los autores materiales para ejecutar el ataque.

Durante las indagatorias, las autoridades lograron identificar a cinco hombres involucrados, entre ellos Juan Antonio Vera Carrizal y su hijo, Juan Antonio Vera Hernández. Los autores materiales, Ponciano "N" y Rubiciel "R", fueron detenidos en diciembre de 2019 y vinculados a proceso, aunque Ponciano falleció en prisión en el año 2021. Rubén "M", alias "El Charles, fue capturado en abril de 2020.

Vera Carrizal, señalado como el autor intelectual del ataque, logró evadir la justicia durante varios meses al obtener un amparo que frenó su captura. No fue hasta abril de 2020 que, presionado por la atención mediática y las acciones de las autoridades, decidió entregarse voluntariamente. A pesar de haber sido vinculado a proceso y encarcelado en el penal de Tanivet, el juicio en su contra estuvo plagado de postergaciones, lo que finalmente culminó en su absolución este 14 de agosto de 2024.