El Instituto Nacional Electoral (INE), bajo la dirección de Guadalupe Taddei, reinició el proceso de baja de los trabajadores que formaron parte de la administración de Lorenzo Córdova, anterior consejero presidente, entre ellos Emilio González, subdirector de Atención a Usuarios de la dirección de Prerrogativas y Partidos Políticos, e Iván Flores, encargado de despacho de Comunicación Social.

Hasta el 27 de mayo, el INE había relevado el 28 por ciento de los directores de área y subdirectores; mientras que el 11 por ciento de los jefes de departamento, lo que ha sido calificado como "grave" y "preocupante" por expertos en temas electorales, administración pública y recursos humanos.

Desde abril de 2023 hasta febrero de 2024, 434 empleados de todos los niveles en las oficinas centrales del INE fueron despedidos, incluyendo más de 90 directores de área y subdirectores. Actualmente, el 80 por ciento de estas posiciones ya han sido cubiertas por nuevo personal, de los cuales casi el 40 por ciento tiene vínculos previos con Guadalupe Taddei Zavala, consejera presidenta, Flavio Cienfuegos, su mano derecha, y Jesús George Zamora, excontralor del INE.

Sólo el 15 por ciento de los cargos, mayormente subdirecciones, han sido ocupados por personal interno del INE, que ascendió o tendrá la oportunidad de hacerlo si se les ratifica el puesto. Los datos del INE revelan que los nuevos perfiles contratados provienen principalmente de los estados de Sonora, Estado de México, Tabasco y Veracruz, con muchos de ellos trabajaron previamente con la presidenta en el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Sonora, el Instituto de Transparencia de Sonora, o con Flavio Cienfuegos en el IMSS, y con Jesús George Zamora en el Estado de México.

La mayor cantidad de despidos de mandos altos se registró en la Dirección Ejecutiva de Administración, con 14, seguida de la Dirección Jurídica, con 12, y el Órgano Interno de Control, con 10.

Del 45 por ciento de cargos restantes, el 6 por ciento están vacantes, el 5 por ciento fueron eliminados del organigrama y el 34 por ciento fueron ocupados por personas provenientes de la iniciativa privada o de otras dependencias del Gobierno Federal, como el Servicio de Administración Tributaria (SAT), la Cámara de Diputados, la Auditoría Superior de la Federación, institutos electorales de otras entidades y dependencias de medio ambiente y energía.

Previo a las elecciones de junio pasado, la consejera presidenta anunció que se llevaría a cabo un replanteamiento organizacional al final del año electoral. Sin embargo, también se espera que el nuevo gobierno o la próxima legislatura del Congreso de la Unión pueda iniciar una reforma electoral que modifique las facultades del INE.