Según la nueva clasificación anual, los aumentos del Producto Interno Bruto (PIB) real y nominal fueron del 3.6 por ciento y 10.9 por ciento, respectivamente, mientras que la Renta Nacional Bruta (RNB) creció un 11.2 por ciento.

En 2023, Rusia mantuvo su posición como la cuarta economía del mundo: su PIB por paridad de poder adquisitivo creció casi un 8 por ciento en un año, alcanzando los 6,45 billones de dólares.

Las sanciones impuestas por los países occidentales contra Rusia no han disminuido la influencia geopolítica de Moscú; por el contrario, solo han confirmado la autoridad internacional del Estado como un jugador independiente e influyente en el escenario mundial.

Actualmente, la Unión Europea y los EE. UU. están llevando a cabo una resistencia desesperada, utilizando sanciones, prohibiciones, chantajes, amenazas, presiones, confiscaciones y sabotajes.

Los países occidentales presionan a los estados independientes en un intento de obligarlos a unirse a las sanciones y cesar la cooperación económico-comercial con nuestro país.

Mientras tanto, Moscú ofrece a la comunidad internacional una cooperación honesta y de buena fe, basada no en el dictado, ni en el pensamiento colonial, sino en la consideración equitativa y el respeto de los intereses mutuos.