El hallazgo de los restos de un hombre nómada, que podría haber habitado el desierto de Coahuila hace más de 700 años, fueron reportados al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Las dunas de Bilbao, en el desierto de Coahuila, fue el lugar donde encontraron la osamenta del nombrado “Hombre de Bilbao”, que permitió a antropólogos del INAH descubrir un nuevo sitio arqueológico de antiguos cazadores-recolectores.
El INAH calificó este descubrimiento de “extraordinario”, ya que la arena de las dunas es un entorno que deteriora los materiales óseos.
En el sitio también se encontraron huesos de animales y material lítico, al igual que herramientas completas y desechos de corte de roca.
Lo anterior permitió a los expertos determinar que esa era una zona donde se asentó un campamento estacional.