La virtual presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, anunciará los nombres de su Gabinete oficial la próxima semana, sin embargo, trasciende el nombramiento de Raquel Buenrostro para dirigir Petróleos Mexicanos (Pemex). 

La petrolera es actualmente de las empresas más endeudadas en el mundo; los incrementos de su deuda con proveedores y contratistas se hace cada vez impagable, pese a que el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador le ha inyectado miles de millones de pesos. 

Buenrostro dirigió el Sistema de Administración Tributaria (SAT) en una parte del sexenio de AMLO, y después fue nombrada secretaria de Economía. Los resultados en el SAT y su “mano dura” son sus cartas credenciales que la hacen favorita para mejorar la deuda y perdidas de Pemex, así como reducir su carga fiscal. 

Sin embargo, Rogelio Ramírez de la O, actual y próximo secretario de Hacienda, no ve con buenos ojos la decisión por problemas personales con Buenrostro. 

De la O propuso a la presidenta electa la designación de un director financiero y un director general, aunque no serían la solución si Pemex continúa con pérdidas, algo que preocupa a inversionistas porque ni las refinerías fueron modernizadas en el sexenio saliente.