Para evitar el colapso de los sistemas y garantizar un suministro eléctrico confiable en el país, expertos aseguran que el sector eléctrico de México requiere una inversión superior a seis mil millones de dólares al año para incrementar los niveles de generación, especialmente de tecnologías renovables, así como para ampliar las redes de transmisión y distribución, y dar mantenimiento a las plantas existentes.

 

“El gobierno federal, en colaboración con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la iniciativa privada, deben trabajar juntos para aumentar el margen entre la generación y la demanda de energía para pasar del seis por ciento actual a un mínimo del 15 por ciento”, urgió el expresidente de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), Guillermo García Alcocer.

 

Recordó que actualmente la CFE invierte cerca de 700 millones de dólares anuales en proyectos prioritarios, una cantidad insuficiente y que se ve aún más limitada por las restricciones a los proyectos de la iniciativa privada.

 

Señaló que la cancelación de las subastas eléctricas en 2019, por parte de la Secretaría de Energía (Sener), fue uno de los factores que contribuyeron al rezago del sector eléctrico nacional. Esta medida, junto con otras políticas restrictivas, ha frenado el desarrollo de proyectos de energías renovables y ha obstaculizado la incorporación de nuevos megawatts al sistema.

 

Además, destacó la “urgente necesidad” de conectar proyectos de energía solar y eólica ya construidos, que actualmente se encuentran en pausa debido a políticas gubernamentales, así como la importancia de diversificar la matriz energética y fortalecer las asociaciones público-privadas para impulsar el desarrollo del sector en el largo plazo.

 

Finalmente, comentó que México corre el riesgo de no aprovechar las oportunidades del nearshoring y de enfrentar un futuro marcado por la incertidumbre energética y el constante riesgo de colapsos en los sistemas eléctricos del país, en caso de no tomar las medidas efectivas e inmediatas.