El informe "Más allá de las fronteras: Estigmas y desafíos en la integración de las mujeres migrantes en América Latina y el Caribe, edición 2024", del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), reveló que las féminas enfrentan una brecha de género en el acceso al empleo y condiciones laborales desfavorables.

 

De acuerdo con el informe, las probabilidades de empleo para las mujeres migrantes son, en promedio, un 22 por ciento menores que para los hombres migrantes. Esta disparidad se ve agravada por la percepción social y la discriminación que enfrentan las féminas, quienes a menudo son asociadas con ocupaciones como el trabajo sexual.

 

Asimismo, el reporte del BID refiere que el 27 por ciento de las mujeres migrantes recibe ofertas con baja remuneración o malas condiciones, mientras que el 25 por ciento de los hombres migrantes padece esa misma situación. Aunado a ello se encuentran las largas jornadas laborales; ya que cuatro de cada 10 féminas migrantes empleadas dedican más de 40 horas semanales a trabajos remunerados y una de cada 10 lo hace hasta por más de 55 horas a la semana.

 

El reporte destacó que el 37 por ciento de las migrantes obtienen trabajo remunerado, pero sólo en el sector informal, mientras que sólo el 20.5 por ciento de los hombres migrantes se enfrentan a ello.

 

Finalmente, el BID identificó que el 13 por ciento de las mujeres migrantes no consiguen empleo porque no les es posible acreditar experiencia laboral y sólo el 10 por ciento de los hombres migrantes tienen la misma dificultad; por lo que urgió a los diversos órganos de gobierno a que cambien las percepciones relacionadas con la contribución económica y laboral de las féminas migrantes en los países de destino, a fin de potencializar su desarrollo.