Ante la próxima evaluación de la Ley SB4 de Texas por parte de la corte de Estados Unidos, los migrantes aseguran que la seguridad, con elementos más equipados y que se comportan cada vez más agresivos, se ha incrementado en las últimas dos semanas en la línea fronteriza entre Ciudad Juárez y El Paso, en el punto 36.

Ante dicho panorama, aseguraron, que están creciendo los desafíos para cruzar la frontera con la presencia de más efectivos de la Guardia Nacional de Texas y la instalación de más alambre de púas, por consiguiente, también aumenta el sentimiento de desesperación entre los migrantes que permanecen en Ciudad Juárez.

Será el próximo miércoles 3 de abril cuando se presentarán argumentos relacionados con la Ley SB4 de Texas en la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos a fin de su validación o rechazo; esta iniciativa tiene como fin específico el de detener y deportar a extranjeros indocumentados.

"Esta situación nos afecta profundamente como migrantes. Imaginen, hemos atravesado selvas y países enfrentando numerosos riesgos. Venimos con la esperanza de cruzar a Estados Unidos, pero esta ley (SB4) nos paraliza", expresó un exmilitar venezolano, Daniel Quintero, quien se mantiene a la expectativa en las orillas del río Bravo para cruzar a EE. UU.

Quintero manifestó su frustración por enfrentar tantos obstáculos luego de un largo viaje desde Venezuela, incluyendo un río contaminado, barricadas de alambre de púas, una cerca de más de dos metros de altura y la presencia militar que impide el cruce hacia tierras estadounidenses, además del muro fronterizo.

"Es extremadamente peligroso. Los militares, incluyendo a la Guardia Nacional de Texas, son militares al fin y al cabo. Yo también soy exmilitar, vengo de Venezuela, entiendo que siguen órdenes y cumplen con normativas. Nuestra meta es encontrar la manera de cruzar al otro lado", concluyó.

Cabe destacar que la frontera entre Juárez y El Paso ha sido el epicentro del flujo migratorio desde 2023, cuando México reportó un aumento del 77 por ciento en la migración irregular, con más de 782 mil extranjeros indocumentados detectados. La tensión se intensificó el año pasado cuando el gobernador de Texas, Greg Abbott, erigió una cerca de púas, medida que se mantiene a pesar de un fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos, y ahora busca implementar la Ley SB4 para que las autoridades estatales puedan llevar a cabo labores migratorias, una facultad reservada al Gobierno federal.