Ni el gobierno municipal de Chimalhuacán, ni el de Nezahualcóyotl, han realizado obras o acciones para sustituir el puente peatonal Los Rosales que colapsó hace ya más de cuatro meses en los límites de ambos municipios del Estado de México gobernados por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).

Después de que la estructura colapsara, el Ayuntamiento de Nezahualcóyotl dio a conocer que etiquetó en su presupuesto recursos para la edificación de un puente, sin embargo, no especificó hasta cuándo lo levantaría.

 

 

Por su parte, el gobierno morenista de Chimalhuacán, encabezado por la alcaldesa Xóchitl Flores Jiménez, optó por clausurar los puentes Los Olivos y el que se encuentra a la altura de la calle Neftalí, que atraviesan el Río de La Compañía y conectan los municipios. A pesar de estas medidas, los habitantes continúan utilizándolos, de lo contrario se verían obligados a transitar por las vías donde circulan vehículos privados y de transporte público.

Quienes cada día ponen en riesgo su vida porque podrían sufrir algún accidente son, principalmente, adultos mayores y personas con alguna discapacidad, quienes, al no poder brincar los puentes clausurados, utilizan el paso vehicular que se encuentra a un lado de la estructura colapsada.

Cabe recordar que fue el pasado 2 de noviembre cuando el puente peatonal Los Rosales colapsó, dejando un saldo de 11 personas heridas; la estructura fue retirada y se estableció un espacio sobre el puente vehicular, para que los transeúntes viajen de Chimalhuacán a Ciudad Nezahualcóyotl y a la inversa.