Al menos ocho periodistas han sido asesinados mientras estaban inscritos en el Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de México en los últimos siete años, una cifra que pone de relieve la urgente necesidad de fortalecer y reformar la institución, afirmaron hoy Amnistía Internacional y el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
En conferencia de prensa para presentar el informe “Nadie garantiza mi seguridad”, Jan-Albert Hootsen, representante del CPJ en México, urgió al Gobierno Federal fortalecer las políticas para la protección de periodistas, pues México, aseguró, es el país más peligroso del hemisferio occidental para los trabajadores de esta profesión.
“El Mecanismo Federal para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas sigue siendo una parte crucial de los esfuerzos del gobierno en México para hacer del país un lugar más seguro para los periodistas, pero sólo puede cumplir ese papel si aborda adecuadamente sus propias fallas”, declaró el representante del CPJ.
Hay que recordar que el Mecanismo Federal se creó en 2012 con la misión de proteger a personas defensoras de derechos humanos y periodistas que se encontraran en riesgo extremo de amenazas y ataques debido a su trabajo.
“Después de años de incesante derramamiento de sangre e impunidad corrosiva, ha llegado el momento de que el Estado mexicano actúe y demuestre que finalmente está dispuesto a tomar en serio sus obligaciones con respecto a la libertad de prensa”, dijo Jan-Albert Hootsen.
Desde el año 2000, al menos 141 periodistas y otros trabajadores de los medios de comunicación han sido asesinados, según la investigación del CPJ. De estos asesinatos, 61 estaban directamente relacionados con su trabajo.
De acuerdo con el Índice Global de Impunidad anual del CPJ, México se ubica constantemente entre los diez países con el mayor número de asesinatos de periodistas que siguen sin resolverse. El CPJ también ha concluido que México es el país con el mayor número de periodistas desaparecidos en el mundo, sin embargo, ni uno sólo de estos casos ha dado lugar a una condena.
Tanto CPJ como Amnistía Internacional coincidieron en que más allá de los asesinatos y desapariciones, los periodistas en México enfrentan constantes amenazas, hostigamiento, abuso físico y psicológico por parte de funcionarios públicos y del crimen organizado. De hecho, el propio Mecanismo Federal ha determinado que los funcionarios públicos son responsables de casi la mitad de las agresiones que ha registrado contra periodistas en México.
Hasta noviembre de 2023, el Mecanismo Federal tenía registro de 651 periodistas inscritos: 469 hombres y 182 mujeres. Pero el número de solicitudes de protección que el Mecanismo ha rechazado ha aumentado considerablemente en los últimos años, pasando de solo una en 2020 a 14 en 2021; 49 en 2022 y otras 49 en los primeros 11 meses de 2023.
En su investigación, Amnistía Internacional y el CPJ registraron que la mayoría de los periodistas continuaron sufriendo incidentes de seguridad después de inscribirse en el Mecanismo, y muchos describieron la respuesta del Mecanismo como lenta, burocrática y carente de empatía.