Durante la primera quincena de febrero, la tasa de inflación se ubicó en 4.45 por ciento, lo cual no sólo contribuyó a que los costos de la canasta básica se incrementaran, también los relacionados con la salud de los mexicanos, según los datos que reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

El Instituto reveló que las hospitalizaciones generales registraron una tasa de inflación de 7.07 por ciento; los medicamentos, de 6.81 por ciento; mientras que la atención durante el parto registró 6.65 por ciento. A estos datos se suma el encarecimiento durante la primera quincena del mes de febrero de servicios de salud como: consulta dental, médica y hospitalizaciones para parto.

Destacó que los únicos servicios de salud que mantuvieron niveles por debajo de la inflación general fueron los análisis clínicos y la operación quirúrgica con tasas de 4.27 y 4.03 por ciento, respectivamente.

Ante este panorama, el planteamiento del presidente Andrés Manuel López Obrador de que México tendría el mejor sistema de salud a nivel mundial parece distante. Estableció marzo como plazo límite para alcanzar esta meta, pero ahora, a sólo siete meses de que termine su mandato, esa promesa quedaría sin cumplirse.

De acuerdo con la investigadora del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP), Judith Méndez, la principal razón por la que México no podrá alcanzar dicha meta es porque no se invierte lo suficiente en materia de salud: “En el país destinamos 3 puntos del Producto Interno Bruto (PIB), a nivel internacional se sugiere el 6 por ciento, pero en Dinamarca no destinan eso sino un 10 por ciento”.

Por su parte, el especialista en salud pública, Octavio Gómez Dantés, aseguró que a pesar de que las decisiones tomadas durante este sexenio han llevado a que la administración en salud sea considerada la peor en la historia del país, algunos sostienen que aún es válido tomar como modelo a seguir el sistema de salud de Dinamarca.

Comentó que: “todos los mexicanos, desde el Presidente hasta un trabajador de limpieza de un servicio público debieran tener acceso a los mismos servicios de la misma calidad; eso lo podemos lograr si tomamos las decisiones correctas. En estos últimos seis años no solamente no se avanzó hacia esa meta, sino que retrocedemos escandalosamente, es sin duda alguna en la historia del sistema mexicano, la peor administración en materia de salud que hemos tenido”.

A medida que el final del sexenio se aproxima, cabe recordar algunos de los cambios que ha experimentado el sector salud durante la administración del presidente de extracción morenista, entre ellos: en 2019 se canceló el Seguro Popular y se estableció el Instituto de Salud para el Bienestar (INASABI). Sin embargo, en mayo de 2023, se emitió un decreto que disolvió este instituto y dio paso al modelo de IMSS-Bienestar. Este nuevo enfoque busca universalizar los servicios de salud y atender a la población sin seguridad social debido a su situación laboral. Sin embargo, si se quisiera alcanzar la universalidad de salud y contar con una cobertura como la de Dinamarca, se requiere que toda la población disfrute de los mismos servicios de salud de manera integral, concluyó Gómez Dantés.