Heinrich fue el hermano mayor de Thomas Mann (La montaña mágica y Los Buddenbrook); escribió 45 libros de poesía, cuento y novela, y sus títulos más conocidos en este género fueron En el país de Jauja (1900), Las diosas (1903) y El profesor Unrat (1905), cuya historia sirvió de argumento para el famoso filme El ángel azul, que protagonizó la actriz alemana Marlene Dietrich.

La primera versión de la novela El súbdito incluía el subtítulo La conciencia pública bajo el reinado de Guillermo II, pero cuando se disponía a publicarla en 1914 su autor (Lubeck, Alemania 1871-Santa Mónica, California 1950) lo eliminó porque evidenciaba su fuerte contenido satírico contra la monarquía medieval que aún prevalecía en Alemania y porque estaba por iniciarse la Primera Guerra Mundial (1914-1918).

Diederich Hessling, el personaje central de El súbdito, es heredero de un fabricante de papel de Netzig, quien después de doctorarse en la Universidad de Berlín y formar parte de la asociación estudiantil Neoteutonia, retorna a su ciudad natal convertido en fanático del monarquismo, el ultranacionalismo, el militarismo, el anticomunismo y el racismo multiétnico, en particular el antisemita.

El súbdito fue creado por Mann con estos rasgos político-ideológicos, con la fisonomía de Guillermo I, con una mirada centellante y torva, una feligresía cristiana extrema, un insobornable machismo (las féminas teutonas respetaban a pie juntillas las “tres P”: parroquia, punto y pañal) y un manifiesto desdén hacia los trabajadores, la gente pobre, el sindicalismo, la socialdemocracia, el ateísmo y todo lo que no fuera “aristocrático”.

Mann describió y caricaturizó con mucho detalle en esta novela el supremacismo racial, socioeconómico, político y religioso que tres décadas después continuaría predominando en la Alemania nazi, cuyos principales dirigentes contaron con el apoyo de la gran burguesía alemana, la europea y la estadounidense a fin de frenar el avance del socialismo soviético.

Uno de los méritos de esta novela, escrita entre 1906 y 1913, se halla precisamente en la denuncia burlona de los ingredientes fascistas ya presentes en Guillermo II, que reaparecieron con Adolfo Hitler (promotor de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) y que ambos heredaron de Guillermo I y su primer ministro Otto Bismarck, quienes en el Siglo XIX habían intentado apoderarse de Europa.

En ninguna de las líneas de esta excelente novela se cita por su nombre a Carlos Marx y a Federico Engels, pero en varias de sus páginas se habla en tono denunciatorio de socialdemócratas, socialistas, comunistas, “rojos” y en alguna oportunidad se hace referencia a la Internacional. En 1931, Mann fue declarado persona non grata en su país; ese año debió emigrar a Francia y en 1932 se declaró abiertamente socialista.